Desde STE-CLM, una vez más y tras los hechos acaecidos en el CEIP Mireia Belmonte de Puertollano que han acabado en los juzgados, denunciamos la complicada situación a nivel de convivencia que se está viviendo por el profesorado de Castilla-La Mancha.

Basta con seguir la actualidad en los medios de comunicación para afirmar que es innegable que estamos asistiendo en los últimos tiempos a un incremento de la conflictividad y un deterioro de la convivencia en los centros educativos de nuestra comunidad autónoma que genera situaciones graves de violencia tanto física como verbal.

Detrás de todo este entramado de situaciones lamentables se esconden motivos de diversa índole, pero es evidente que existe un denominador común: la desconsideración hacia la figura del profesor/a y del maestro/a.

Por otra parte, cuando se producen este tipo de agresiones, asistimos a un discurso manido lleno de frases huecas de nuestros políticos donde afirman: “son hechos puntuales”, “esperamos que no se repitan” , “lamentamos la situación de las víctimas” …

La Ley de Autoridad del Profesorado vigente en nuestro ordenamiento jurídico parece que no es suficiente para evitar la degradación actual y la Unidad de Atención al Profesorado de la Consejería de Educación, así como el Observatorio de la Convivencia regional no son instrumentos útiles para reducir o frenar estos hechos execrables cada vez más habituales.

Desde STE-CLM nos esforzamos día a día por romper esta cadena perversa asociada a contravalores que, sin duda, diluyen el trabajo del profesorado por avanzar desde la educación hacia la paz, la convivencia, la igualdad y el respeto a los demás.

Tras varios años de denuncias por parte de nuestra organización, la Administración Educativa sigue sin tomar conciencia de la importancia de este asunto y no trabaja sobre los
principales aspectos que atajen el problema como son:
– Concienciación del incremento de las agresiones a los profesores en los últimos años.
– Análisis sobre el perfil del agente violento (familiares o alumnos).
– Motivos que esgrimen para la agresión.
– Revisión del protocolo a seguir ante una agresión.
– Medidas que se proponen para revertir la situación.

Igualmente, denunciamos en su momento que esta violencia tenía que ser atajada desde la raíz con un alto compromiso social y de todos los estamentos involucrados en la educación, porque los centros educativos no pueden ser lugares donde los trabajadores y trabajadoras de la enseñanza acudan con miedo, vivan tensiones todos los días o se sientan coaccionados. Esto nos llevó a reclamar que se habilitase un protocolo realista para estas situaciones porque la mejora de las condiciones laborales también pasa por aquí.

Ante la necesidad de evitar la degradación actual, desde STE-CLM instamos a la Administración a reflexionar sobre este aspecto y exigimos que trabaje en los ámbitos de prevención y legislación para introducir los cambios necesarios sobre la consideración social de la figura del profesorado para poner en valor su función educativa.

No debemos obviar el papel de nuestros representantes políticos. Es muy fácil encontrar la foto de un Delegado de Educación en una fiesta de jubilados de algún sindicato, a un consejero en inauguraciones y eventos festivos de todo tipo, pero es muy difícil verlos en las puertas de los juzgados apoyando al profesorado, posicionándose a favor de las víctimas de estos terribles hechos en los propios centros educativos y poniendo en valor en los medios de comunicación ante toda la sociedad a quienes trabajan formando las generaciones futuras.

Hace unos días, en una rueda de prensa en la puerta de los juzgados de Ciudad Real antes de la celebración de la vista oral sobre la gravísima agresión física a seis docentes de un mismo centro de esta provincia, uno de los periodistas lanzaba esta pregunta: ¿Están los profesores indefensos? No cabe duda que la respuesta está en el enunciado de la pregunta.

Finalmente, y como respuesta a la situación actual, desde STE-CLM nos resistimos a continuar así y reclamamos las acciones y los cambios necesarios a la Administración para que se aplique una de las máximas que utilizamos los y las docentes en las aulas como lema para evitar el acoso escolar entre alumnos: AHORA QUE LO SABES, NO PUEDES FINGIR IGNORANCIA

HACEMOS LO QUE DECIMOS, DECIMOS LO QUE HACEMOS