Desde STE-CLM valoramos positivamente que la Consejería de Educación invierta recursos en el desarrollo de una aplicación informática que facilite la labor del profesorado en la elaboración de las programaciones y la evaluación de las mismas, y que con ello se intente reducir la burocracia.
Sin embargo, una vez puesta en marcha esta medida, el profesorado se encuentra con numerosas deficiencias y contradicciones:
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- Carencias en la aplicación: Por una parte, a finales de septiembre del presente curso 2023/24, la aplicación no está terminada y falta por implementar muchas funcionalidades que se vendían como bondades, como, por ejemplo, la integración de las aulas virtuales con el módulo de programación. Con esto, lejos de reducir la burocratización, se incrementaría incluso más, pues supone duplicar tareas en diferentes plataformas.
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- En cuanto a las aulas virtuales de EducamosCLM, se ha promovido el uso de estas por parte de la Consejería en detrimento de otras plataformas, sin contar con el respaldo suficiente a nivel de infraestructura en cuanto a servidores o ancho de banda, lo que está dando lugar a constantes caídas de red que imposibilitan su uso y que no son operativas para los docentes.
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- Formación y plazos no adecuados: La formación en algo tan novedoso debería ser más extensa y los plazos para presentar la programación se deberían de ampliar, pues el profesorado tiene demasiada carga de trabajo al comienzo de curso como para poner unos plazos tan cortos.
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- Malestar del profesorado: Gran parte del profesorado ha mostrado su malestar debido a la incertidumbre en cuanto a la obligatoriedad o no de tener que hacer este “Cuaderno de evaluación”, ya que la administración aseguró en su día que SERÍA ALGO OPCIONAL.
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- Rechazo generalizado: El sentir general que nos está llegado es que, por todos esto motivos, gran parte del profesorado no va a estar dispuesto a participar de esta nueva medida, a la cual se vería arrastrado al quedar la decisión final en manos de los claustros.
Desde STE-CLM exigimos a la Consejería que se solucionen todas estas deficiencias, que este “año de pruebas” CADA DOCENTE PUEDA DECIDIR LIBREMENTE SOBRE SU UTILIZACIÓN y que sea una herramienta realmente práctica para el profesorado y no les genere más carga de trabajo.
